El terremoto que devastó la frontera entre Turquía y Siria y donde se contabilizan más de 30 mil muertos, no solo tiene historias de horror y dolor. También hay milagros, amor y entrega de muchas personas que arriesgaron sus vidas por salvar a otros.
Es el caso de dos enfermeras turcas que, pese al miedo y al riesgo, corrieron a la sala de neonatología para proteger a los bebés que se encontraban en incubadoras.
Imágenes que “nos hacen recobrar la fe”
El pasado lunes 6 de febrero, cuando el terremoto de magnitud 7,8 azotaba la ciudad de Gaziantep, en el sureste de Turquía, en la unidad neonatal del hospital dos enfermeras en vez de salir, corren a las incubadoras y las sostienen para salvar a los bebés.
Las imágenes de seguridad de la unidad neonatal del Hospital Gaziantep İnayet Topçuoğlu, publicadas por el Ministerio de Salud este domingo 12 de febrero, muestran como el sismo sacude la habitación antes de que dos enfermeras entren corriendo y se aferren a las incubadoras para estabilizarlas.
Una actuación calificada como “heroica” en las redes sociales y en los portales de los medios de comunicación más importantes del mundo.
Mujeres con mucho coraje
El video ha generado multitud de reacciones alabando el coraje de ambas enfermeras que pusieron en riesgo la vida para salvar a los recién nacidos.
“Noticias que nos hacen recobrar la fe en la humanidad”, “Esas sí que son heroínas dispuestas a dar su vida x salvar otras vidas”, “Estos seres humanos me hacen creer que todavía hay humanidad. Proteger a lo más indefenso del mundo no tiene agradecimiento”, son algunos de las infinidades de mensajes que circulan en las redes sociales sobre el video”.
Una escena como esta se suma a la infatigable ayuda de equipos de rescates y funcionarios que han llegado de todo el mundo para hallar con vida bajo los escombros a miles de personas y niños. Nadie pierde las esperanzas y la fe de un milagro.
Una cifra que se incrementa
Según el diario El País, hasta este lunes 13 de febrero se contabilizan más de 35.000 muertos, además, 85.000 personas han resultado heridas. La mayoría de los fallecidos se concentra en Turquía.
El último balance facilitado por Ankara eleva el total de víctimas mortales en el país a 31.643, mientras que los heridos superan los 80.000.
En Siria, la ONU cifra los fallecidos en 4.300, frente a los 3.580 de los últimos balances del Gobierno sirio y los rebeldes.
Aunque las posibilidades de hallar supervivientes son ya muy escasas, los equipos de rescate internacionales siguen adelante haciendo pequeños milagros.