No hubo una mejor forma de iniciar octubre, el mes del pasillo ecuatoriano en honor a Julio Jaramillo y otros grandes exponentes. La cantante nacional, María Isabel Albuja, presentó su trabajo ‘Mi raíz’, una recopilación de hermosos pasillos que se puede disfrutar mediante todas las plataformas digitales, incluso youtube.
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Se trata de una propuesta para rescatar nuestros pasillos tradicionales con la inserción de un pasillo contemporáneo escrito junto a Daniel Pacheco. He usado un tipo de jazz tocando el piano, el contrabajo y la batería. Hemos conseguido arreglos modernos, pero que conservan el alma del pasillo nacional”, señala María Isabel.
En este trabajo vamos a encontrar la ‘Tejedora Manabita’ por ejemplo, pero con introducciones e interludios distintos, con un aire moderno.
“Tenemos más canciones como: ‘Al oído’, ‘Invernal’, ‘Sombras’ que la hice como jazz-flamengo en el disco. Además, Daniel Pacheco hizo ‘Al compás’ para ponerlo en mi disco que todos se pueden descargar y tenerlo en su ‘playlist’”, dice Albuja.
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María Isabel hizo una investigación sobre el pasillo ecuatoriano. Este género que es parte de nuestra cultura y la conciencia popular, ha perdido espacio a causa de la globalización musical que cada vez tiene más géneros.
El pasillo está muy arraigado en las generaciones de nuestros padres y abuelos. La idea es que los jóvenes ya no lo vean como algo anticuado. Con un cambio en la sonoridad y armonías más modernas se puede revivir este género y hacerlo atractivo para los jóvenes.
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María Isabel realizó una maestría en gestión cultural de la industria musical, y este revivir del pasillo con nuevos sonidos fue la base de su tesis. “En mi casa no se escuchaba pasillos, pero yo recuerdo, de niña, todas esas canciones y siempre se me hizo fácil de cantar”.
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María Isabel tuvo una formación como músico clásico. Estudió en el conservatorio y luego estudió canto lírico. En la universidad, fue parte del elenco estable del Teatro Sucre. Fue parte de las principales óperas musicales y ha sido solista de la orquesta sinfónica nacional, pero sin dejar el lado popular.
