Un venado bebé herido fue el inicio de un rincón mágico a solo 76 kilómetros de Quito. “La Casa del Venado” es un criadero de esta especie ubicado en Cayambe, al norte de Pichincha, en el que se puede compartir con este animales en un ambiente natural y especial.
PUBLICIDAD
Julio Villalba cuenta que la idea de formar este criadero de venados nativos surgió cuando rescataron a un venado bebé que llegó malherido, lo curaron, y al estar bien atendido, nunca se fue.
En este lugar, los venados no están enjaulados como en un zoológico, sino libres para compartir con los visitantes, quienes puede compartir directamente con ellos en su hábitat y disfrutar del lugar.
“Cuando el turista llega, siente un mundo nuevo, naturaleza y vegetación, todos compartiendo el mismo espacio; y se puede sentir esa energía que no se la percibe en las nuevas ciudades”, Villalba.
Para llegar al lugar, hay que dirigirse hasta el monumento de la Mitad del Mundo en Guachalá, de ahí a un kilómetro, a mano derecha se desvía de la carretera y se puede ver el letrero del refugio.
Acompáñanos en este recorrido en Destinos, de Ikono.