Para saber la información que Facebook reúne de una persona, solo hay que preguntarle y recibirá un archivo con cada fotografía y comentario que ha publicado, los anuncios en los que ha hecho clic, las cosas a las que le ha dado “like”, las búsquedas que ha hecho y sobre cada persona que ha agregado como amigo, así como a los que ha eliminado, desde la creación de su cuenta de la red social.
Este tesoro de información se utiliza para decidir qué publicidad mostrar. También hace que el uso del Facebook sea más fluido y agradable, esto debido a que la red social determina qué publicaciones mostrar o los cumpleaños que debe recordar.
Facebook afirmó que protege toda la información que recopila de sus usuarios y establece los términos en una política de privacidad que es relativamente clara y concisa. Sin embargo, pocos usuarios se toman el tiempo para leerla, y podría sorprenderles lo que la política de privacidad de Facebook permite y lo que no deja claro.
Las prácticas de privacidad de la red social se han visto en el ojo del huracán luego de que una empresa de análisis de datos, Cambridge Analytica, obtuvo indebidamente la información de millones de usuarios de Facebook. Aunque en el pasado las disputas de privacidad se han enfocado en lo que los anunciantes reúnen de los usuarios, en esta ocasión la situación empeoró debido a que la compañía británica supuestamente creó perfiles psicológicos para influenciar el voto de la gente o incluso su postura hacia la política y la sociedad.
Facebook defendió su recopilación de información y sus actividades, y destacó que sus acciones se rigen bajo una política de privacidad que comparte con sus usuarios. Debido a años de escándalos por privacidad y presión por parte de los usuarios y reguladores, Facebook también ofrece un complejo conjunto de controles que permite que los usuarios limiten qué tanta información quieren compartir.
El usuario puede desactivar la publicidad focalizada y en su lugar ver publicidad genérica, así como la de la televisión o del periódico. En los ajustes de publicidad, el usuario necesita desactivar todos sus intereses, interacciones con compañías, con sitios web y otra información personal que no quiera que se utilice para fines publicitarios.
Facebook explicó que coloca a la persona en categorías con base en sus actividades. Así que si tiene 35 años, vive en Seattle y ha hecho clic en una página de actividades al aire libre, Facebook podría mostrarle un anuncio de una tienda de bicicletas de montaña.
Fuente: AP