Los juegos de rol son el vehículo que muchas parejas utilizan para darle más sazón a su vida intima.
PUBLICIDAD
Miss Sauron. Es modelo de fetiches, especialmente los relacionados al látex y la dominación. Al verla, enfundada en su atuendo ajustado y reluciente, es inevitable que la imaginación vuele y es difícil imaginarla fuera de “personaje”. Pero, ¿cómo se descubrió a sí misma como una diosa de la dominación? ¿En qué momento una chica se da cuenta de que le gusta infligir dolor, humillación y mantener sometidas a otras personas?
VICE charló con ella y con su pareja, y ambos contaron cómo fue que se descubrieron como sadista y masoquista, respectivamente. Presta atención, quizás te identifiques con algo de esto y descubras algo de tu personalidad que no sabías.
VICE: Miss Sauron, te ves tan cómoda en esta segunda piel que parece que hubieras nacido así, con los fetiches ya integrados. Pero, ¿esto siempre fue así? ¿Es algo que ya traías contigo?
Miss Sauron:siempre que me preguntan cómo fue que me convertí en dominatrix recuerdo que muy en mis inicios yo era sumisa. Siempre me llamó la atención este mundo, pero no sabía exactamente dónde encajaba. Hasta que un día vi unos videos de una mujer enfundada en trajes de látex, que además se dedicaba a someter. Ahí fue donde todo cambió, como si algo se hubiera despertado. Así fue como inicié en la dominación.
¿Hubo algún indicio en tu juventud, infancia o adolescencia en el que te dieras cuenta de que te llamaba la atención la dominación?
Ahora que lo dices, sí hubo algo. A mí siempre me han gustado los videojuegos. Recuerdo que una vez jugando King Of Fighters, estaba peleando contra un personaje que se llama Chris, un chavito. Al final, cuando lo derrotabas, Chris aparecía arrodillado, humillado. En ese momento sentí unas ganas increíbles de seguirlo humillando, de golpearlo, de agarrarlo de los pelos y azotarlo. Obviamente no pude, por ser un personaje virtual, pero me habría encantado hacerlo en la vida real.
¿Qué edad tenías en aquél entonces?
¡Uy, tenía unos 12 o 13 años!
PUBLICIDAD
Entonces, ¿crees que esto es algo que ya se trae?
Sí. Yo puedo decirte que lo tengo en mí desde que tengo uso de razón.
Si tú pudieras mencionar 3 características que definen a una persona que encuentra placer en la dominación, ¿qué características serían? ¿Cómo una persona se da cuenta de que tiene cierta tendencia hacia el sadismo?
La primera: siempre hay cierta atracción hacia poseer. No poseer de una manera abusiva, porque esto siempre es algo consensuado.
Segunda: dan ganas de lastimar, pero de una forma erótica. No es lo mismo que te hagan enojar en la calle o en tu trabajo y quieras agarrar a cachetadas a alguien, a que te guste lastimar en un contexto más privado o erótico. Si eres de los que te gusta morder un labio o jalar el pelo, eso ya podría ser un indicio.
Y tercera: debes tener una personalidad fuerte, una personalidad de líder. Si eres de los que te gusta llevar las riendas en una relación dentro y fuera de la habitación, ahí tienes otro indicio. Porque un líder es ante todo una persona que se hace cargo, y ese es el otro lado de la dominación: es tener muy marcado un lado maternal o paternalista, saber que tienes a alguien más a tu cargo y a tu merced.
¿Tú crees que, como diría el Tío Ben, con un gran poder viene una gran responsabilidad?
¡Justo así!
Abiel es la pareja de Miss Sauron. Cuando no son una pareja que está imbuida en las dinámicas BDSM, podrían ser una pareja como cualquier otra, pero con algunos rasgos de dominación y sumisión que se expresan en pequeños detalles.
VICE: Abiel, ¿cómo lidias con ser la parte sumisa de la pareja? ¿No tienes que pasar por momentos incómodos o batallar con prejuicios machistas?Abiel: En realidad lo disfruto. Mis amigos sí se sacan de onda y no terminan de entender cómo es que a su amigo el grande, el metalero, le gusta que lo dominen. No les cabe en la cabeza la idea. Yo lo disfruto mucho, es muy relajante dejar el mando. Y para ti ¿cómo fue que descubriste que te gustaba ser dominado? ¿Cómo alguien se da cuenta de que le gusta el dolor?
Abiel:Yo, al igual que ella, considero que ya es algo que traes. Por ejemplo, me acuerdo que cuando era niño, cuando me portaba mal y me castigaban físicamente, como con un manazo, en lugar de pasarlo mal, era algo que de alguna forma hasta disfrutaba y me daba risa. Nunca busqué el castigo, porque no era problemático, pero cuando llegaba el castigo, no lo pasaba mal, me divertía.
¿Y ya de adulto?
Abiel:Fui creciendo y me di cuenta de que el dolor no me afectaba, al contrario, me gustaba. Aunque nunca he sido violento o agresivo, cuando llegué a participar en peleas, cuando llegaban los golpes, no me afectaban. También me gustaba mucho meterme al slam, porque te estás divirtiendo con la música y al mismo tiempo estás siendo golpeado y es algo que se disfruta. Luego la conocí a ella (Miss Sauron) y descubrí mucho más de mí. Así llevamos casi un año juntos.
¿Y cómo se expresa en su día a día esta dominación y sumisión? Porque supongo que no están 24/7 en sus “papeles” de dominatrix y dominado.
Abiel:pues en cosas muy sutiles, por ejemplo, a mí me gusta ser muy servicial con ella…
Miss Sauron:¡Y eso es lo mejor, porque nos entendemos muy bien! Precisamente porque es tan servicial, yo después de un día cansado llego y le digo: ¡abrázame! ¡hazme piojito! Somos un par de ñoños, somos como gatitos el uno con el otro. Y si bien nunca dejamos del todo nuestros roles de dominadora y dominado, hemos sabido incorporarlo a nuestras dinámicas y a nuestras ñoñerías de pareja.
¿Y con sus familias cómo lo llevan? ¿Saben de sus dinámicas?
Miss Sauron:Yo soy bastante abierta y saben perfecto a lo que me dedico, saben que soy una dominatrix profesional. Creo que de alguna manera ya se lo esperaban, porque siempre fui la “rara” de la familia. Yo creo que siempre están pensando: “a ver con qué nos va a salir ahora Gisela”, porque así me llamo. Pero cuando me han preguntado sobre mis actividades —como cuando cuando mi papá me dijo que no entendía bien—, sólo le dije: “mira papá: yo me dedico a complacer a la gente, sin sexo de por medio. Los maltrato, los humillo, los golpeo, ¡y encima me pagan!”.
Abiel:En mi caso, mis hermanos saben y de alguna forma para ellos es bleh. No así con mis papás, con ellos mejor me lo ahorro porque sé que en cuanto le diga a mi mamá, de inmediato va a ir corriendo a contarle a mis tías y pues, gracias, pero no gracias.
Finalmente, si una persona tiene inquietudes o quiere acercarse al mundo BDSM, ¿a dónde les recomiendan acudir?
Miss Sauron:Hay lugares como Sádica Tentación, Sado MX, o Calabozo MX. En Calabozo MX hay fiestas, actividades, talleres, pláticas y conferencias. Ahí pueden aprender mucho de cómo se dan los primeros acercamientos, protocolos y resolver en general todas las dudas que tengan.
Miss Sauron y Abiel, la dominatriz y el dominado, continúan en sus sillas haciéndose caricias mientras yo me despido de ellos. Podrían ser una pareja cualquiera y lo son: sólo tuvieron la fortuna de encontrar en sus respectivas personalidades el complemento perfecto, como cuando se juntan el hambre y las ganas de comer.
¿Será que todos tenemos algo de sádicos o de masoquistas? ¿Será que a todos nos gusta en algún momento dominar o ser dominados, pero no nos hemos dado la oportunidad de descubrirlo o que no hemos encontrado la persona indicada para dejar a nuestros instintos fluir?