El príncipe Felipe, tras su muerte, dejó una importante herencia y varias personas que no pertenecen a la familia real fueron incluidas en su testamento. El duque de Edimburgo repartió un monto aproximado a los USD 42 millones.
El rotativo Daily Mail reportó que Felipe recompensó a su secretario privado, al brigadier Archie Miller-Bakewell y a los pajes William Henderson y Stephen Niedojadlo. Ellos formaban parte de un grupo de seis ayudantes que caminaron en su procesión fúnebre detrás de los miembros de la familia real.
¿Qué rol cumplieron?
El medio inglés apuntó que los tres hombres apoyaron de gran manera en los últimos años de vida del príncipe Felipe. Niedojadlo fue el principal de sus asistentes; Archie fue el secretario privado y mano derecha.
Ambos fueron parte del equipo que debió cuidar a Isabel II y su esposo cuando otros miembros del personal se vieron obligados a aislarse.
Mayor parte de la herencia
La mayor parte de la herencia del príncipe Felipe la recibió su esposa la reina Isabel II. Por su parte, el dinero para sus nietos fue un tema que quedó resuelto incluso antes de su muerte.
Significa que el príncipe Harry podría recibir algo de dinero en efectivo a pesar de lanzar una serie de feroces ataques contra la familia real en su entrevista con Oprah Winfrey en marzo pasado.
Últimos regalos
Un informante contó a Daily Mail que el Duque de Edimburgo, en sus últimos días de vida, dedicó tiempo a firmar fotografías de él. Estas imágenes se entregaron a las personas que estuvieron con él durante su delicado estado de salud.
Antes de su muerte, Felipe estaba recibiendo 359.000 libras esterlinas (510 mil dólares) al año de la Subvención Soberana.