Una abuelita llamada Elsa escribió una emotiva carta agradeciendo la labor de una voluntaria en la Cruz Roja. Con palabras de aliento escribió palabras de aliento para todos los galenos que luchan a diario para curar a decenas de pacientes con COVID-19 que llegan a diario a los hospitales.
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Elsa, mientras esperaba para recibir la primera dosis de la vacuna contra la COVID-19 en el cantón Rumiñahui, Pichincha, le entregó una carta a la voluntaria de la institución mencionada.
«La «nueva normalidad» nos ha afectado a todos de manera distinta. Algunas personas pueden trabajar desde sus casas, mientras que otros tienen que salir a buscar el sustento. Si este es su caso, valoramos el gran esfuerzo que hace pues se enfrentan a la realidad que estamos viviendo. Puede que el exceso de trabajo, las preocupaciones, los hagan sentir agotados. ¡ÁNIMO! Deseamos que todas las personas de la comunidad cumplan con estas palabras a favor de ustedes y espero muestren tenerlos en muy alta estima para que sigan con su trabajo sin desfallecer. ¡No se rindan los necesitamos! Un espíritu aplastado te deja sin energías. Isaías 17:22«, dice la carta de la abuelita Elsa.
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Según información del Ministerio de Salud, hasta el 10 de abril, 274.160 personas ya han recibido la primera dosis de la vacuna; y cerca de 183.300 la segunda dosis.
