Existe el mito que las bebidas alcohólicas, específicamente la cerveza, hace que engordes. El divulgador científico y periodista británico Tony Edwards ha escrito el libro “The Good News About Booze” donde desmonta todas nuestras ideas, a su juicio erróneas sobre el alcohol.
A pesar de no existir evidencias sobre el incremento de peso por el consumo de cerveza, te contamos que esta bebida se ha convertido en imprescindible para compartir un momento ameno con amigos, pero ¿qué pasaría si crearan una bebida que te ayude a ganar masa muscular?
Esta misma duda les nació a dos jóvenes, Tristan Brummer y Erick Dimter. Los muchachos gustan de ejercitar sus cuerpos, pero como buenos alemanes adoran la cerveza, así que crearon una bebida única.
La bebida, según los teutones, hace crecer el músculo y no tu barriga, por lo que puedes beber después de una rutina de ejercicios. La bebida JoyBräu es un concentrado proteínico de 21 gramos por botella que además es una cerveza sin alcohol. Sabe a cerveza y es capaz de hacer las delicias de cualquier deportista.
Beneficios
- Ayuda a mantener y desarrollar la masa muscula
- BETA-ALANINA: provoca una mejora y un aumento en el rendimiento físico
- Su reducido contenido calórico no afecta a los niveles de glucosa en sangre.
- Sus ingredientes son 100% naturales y sin procedencia animal
- L-CARNITINA: hace que obtengas la energía tras metabolizar las grasas
- Leucina, Isoleucina y Valina: Aminoácidos esenciales que favorecen la regeneración muscular tras la práctica de ejercicio físico
De dónde surgió la idea
Tristan tiene 23 años y Erik 24 y trabajan en Singapur, que fue donde surgió la idea de esta bebida. Acudían al gimnasio y también a un bar local, así que de pronto se dieron cuenta que se encontraban con un insípido batido de proteínas en una mano y una deliciosa cerveza en la otra, y ahí llegó la iluminación.
Reto
El mayor reto del desarrollo del producto fue, entre otras cosas, resolver las cantidades deseadas de aminoácidos en una matriz de cerveza de modo que el resto de propiedades de la cerveza no se vieran alteradas, en particular los cambios sensoriales en el sabor, color, sensación en la boca, la dulzura y acidez.