Un total de tres medidas se ha tomado por parte del Ministerio del Interior de Colombia previo a la jornada de manifestaciones que se planean para este jueves 21 de noviembre.
La primera, suspender el porte de armas. La segunda, cerrar los pasos fronterizos terrestres y fluviales desde 00:00 del 21, hasta las 00:00 del viernes 22. Por último, los alcaldes y gobernadores, de acuerdo con las circunstancias, podrán restringir la circulación en lugares públicos, decretar el toque de queda y prohibir el consumo de alcohol.
Fronteras cerradas
Señalan que la medida cobija a los 12 puestos de Control Migratorio, se adopta “con el fin de garantizar la total normalidad en el desarrollo de las marchas que se adelantarán en diferentes regiones del país”.
Las decisiones llegan después de que el Departamento de Inteligencia del Gobierno Colombiano detectaron la intervención de varios extranjeros que estuvieron en Chile y que vienen hacia Colombia.
El director de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento, señaló que se instalará un Puesto de Mando Unificado (PMU) «en las instalaciones de la autoridad migratoria colombiana, en el cual se monitoreará permanentemente el comportamiento de los diferentes pasos fronterizos, así como el desarrollo de las marchas».
Por qué son las protestas en Colombia
El descontento en Colombia tuvo una manifestación institucional en las elecciones a alcaldes y gobernadores. Ahí los extremistas sufrieron una gran derrota, y la centroizquierda se convirtió en la nueva protagonista del mapa político regional.
Los organizadores convocaron al paro con argumentos en su mayoría de corte económico: contra el paquetazo, la OCDE y el FMI. Además, entre otras razones de protestas destacan que el continuo asesinato de líderes sociales, indígenas y excombatientes de las Farc; reclutamiento forzado de niños por parte de los grupos ilegales y la desigualdad.