“Estamos en el conteo regresivo para el próximo censo de población y vivienda”, que se realizará en noviembre de 2020, señaló el director del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) durante un conversatorio. Pese a que estamos a un año de este gran evento, el Instituto viene trabajando en las fases preparatorias para esta “gran fotografía que nos permitirá saber cuántos somos, dónde estamos y en qué condiciones vivimos”, pues un censo es la principal fuente de información que tiene un Estado para atender las necesidades de su población. “El ciclo de vida del anterior censo (2010) ya concluyó y es necesario hacer una actualización”, expuso el Director. El VIII Censo de Población y VII de Vivienda 2020 se prepara desde 2017 y tendrá un período de vida de cinco años, aunque la vigencia de sus resultados alcanzará una década. Es un proyecto de inversión en infraestructura que, según normas técnicas internacionales, se ejecuta cada diez años por considerar que es un tiempo adecuado para evaluar los cambios que se presentan en los patrones demográficos. En las etapas previas del Censo 2020, se trabaja en la actualización cartográfica que es un conteo rápido de personas y viviendas para actualizar los mapas del país y planificar la distribución de estudiantes de bachillerato que serán necesarios para la recolección de datos de la población. Este proceso tiene un avance del 49 % -a la fecha- y se prevé que concluya en junio de 2020. La última fase se desarrollará en las ciudades con mayor dinámica poblacional como Quito o Guayaquil. Censo 2020Otro hito corresponde al desarrollo del contenido del cuestionario censal, cuya comprensión se probará en un simulacro. En alrededor de 60 reuniones, con la participación de 650 delegados y el acompañamiento de Naciones Unidas se determinaron las preguntas a formular, relacionadas con aspectos estructurales. Tomará entre 45 a 50 minutos que la ciudadanía responda y aborda aspectos de hogar y vivienda, migración y población; y discapacidad, fecundidad, trabajo y educación. Simulacro para el censo 2020 será el 24 de noviembre El simulacro, que según estándares técnicos debe realizarse un año antes del censo nacional, se llevará a cabo el próximo domingo 24 de noviembre en cuatro cantones del país: Celica (Loja) Cumandá (Chimborazo) Puerto López (Manabí) Pedro Vicente Maldonado (Pichincha). Ahí se probarán los procedimientos previstos, lo que permitirá solventar o corregir cualquier inconveniente que se presente. Para el efecto, se contará con el apoyo de 20 observadores internacionales, que emitirán sus sugerencias para fortalecer los planes. En esta prueba, denominada censo experimental, se recolectará información en 21 600 hogares, que implica a 76 000 personas. Serán 2 200 estudiantes de bachillerato y 310 profesores los encargados de visitar cada vivienda, con el apoyo de 140 técnicos del INEC. “Este simulacro es un ejercicio que -en territorio- genera cohesión social”, pues usamos una Junta Promotora que es la suma de un conjunto de actores que promueven el censo. Las Juntas ya están instaladas, presididas por los alcaldes de cada cantón, mientras el Instituto provee de contingente técnico, detalló. Los resultados preliminares del censo experimental servirán a los GAD para elaboración de sus planes de desarrollo territorial. Por eso, el llamado a quienes residen en las localidades seleccionadas para que el domingo 24 de noviembre, se queden en casa, le abran la puerta al censista y respondan con sinceridad al cuestionario, acotó. “El INEC es una institución técnica y en este censo trabaja de manera cercana con el sistema de Naciones Unidas, porque creemos que tener en cuenta la experiencia internacional y el aval o acompañamiento técnico de un externo, legitima el ejercicio, despolitiza las cifras y da cuenta de un proceso transparente y público”. El INEC da las herramientas, pero quien hace posible que podamos tomar esta gran foto del país es el ciudadano, el generador de la información y como tal, quien no puede perderse esta imagen, insistió el Director y detalló que no invertir en un censo puede traer dificultades importantes a la hora de ser efectivos en el gasto público.