La Amazonía es el bosque tropical más grande que existe, este espacio natural alberga innumerables formas de vida que aún desconocemos y quién sabe cuántos secretos más. La Amazonía tiene 7,4 millones de km; la existencia de este espacio es vital para los esfuerzos contra el cambio climático.
Desde hace al menos dos semanas se han registrado grandes incendios forestales en Bolivia y Brasil, este último país contiene el 60% de este gran bosque tropical. El estado de Rondonia fue el último lugar que se encuentra afectado por el fuego.
Las imágenes provoca escalofríos en los usuarios de la internet, animales huyendo de las llamas y miles de árboles consumidas por ellas, son los cuadros que han quedado grabado de este terrible acontecimiento.
Según reportes de las autoridades del lugar, el incendio forestal no ha podido disminuir con el paso de los días y sigue avanzando en la zona forestal de la Amazonía.
La selva Amazónica absorbe 1 000 millones de toneladas de dióxido de carbono, lo que evita la concentración de gases de efecto invernadero, causando del cambio climático.
Debido al incendio provocado por la mano del hombre, según activistas mundiales, se ocasionará que ese dióxido de carbono sea liberado de nuevo a la atmósfera.
El Programa para Amazonía del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF siglas en inglés) indica que el bosque contiene 40,00 especies de plantas, 427 de mamíferos, 1 300 aves, 378 reptiles y más de 400 anfibios, alrededor de 3000 peces de agua dulce y 400 pueblos indígenas diferentes.
En este sentido, los expertos y activistas del mundo coinciden en que la continua destrucción de la Amazonía representa una amenaza para el futuro de la humanidad.
Recientemente, el presidente Bolsonaro respondió a un periodista europeo: “La Amazonía es nuestra, no suya”. Pero si las consecuencias son para el planeta, entonces su propiedad es de todos los seres vivos.