Este 1 de agosto, repartidores de la empresa Uber Eats realizaron un plantón afuera de las oficinas de la empresas ubicadas en el norte de Quito.
PUBLICIDAD
En los contenedores de comida con la que trabajan llevaban carteles que decían «No más abusos».
Uno de los repartidores explicó que el motivo de su presencia en el lugar es por la rebaja en las tarifas por las entregas que realizan a domicilio.
«La tarifa que actualmente Uber propuso para cada uno de nosotros, socios conductores repartidores, estamos perdiendo hasta un 50%. Una carrera mínima antes nos pagaban 1.60, ahora 90 centavos. Lo cual no cubre ni la gasolina, ni gastos personales».
Además mencionan que lo que la empresa les propuso fue que que cada socio conductor que cumpla con 200 entregas durante este mes, se le dará un bono de 100 dólares, pero ellos afirman que significa recibir lo mismo que ganaban antes pero encubierta como promoción.
Su pedido es que la empresa devuelva la tarifa que anteriormente les estaban dando y esperan hablar con un representante para llegar a un acuerdo.
