Todo el mundo estuvo preocupado de su vida, sin embargo, a medida que pasaban los días las esperanzas se fueron extinguiendo y ayer se confirmó lo peor.
El pequeño Julen, el niño que había caído a un pozo en la localidad de Totalán en España, fue encontrado muerto por los mineros luego de más de 30 horas de arduo trabajo.
Tras conocerse la noticia de la caída hace casi dos semanas, comenzaron los esfuerzos por sacar al niño del pozo, pero los rescatistas tuvieron múltiples complicaciones por la dureza del terreno.
Luego de 13 días, era prácticamente imposible que Julen siguiera con vida, sin embargo la familia siempre mantuvo una pequeña ilusión, ya que no querían repetir la tragedia que habían vivido hace menos de dos años.
En ese momento, y cuando Julen sólo tenía unos meses, su hermano Oliver de tres años falleció por muerte súbita.
“¡Otra vez no!, ¡otra vez no!”, fueron parte de los desgarradores gritos que se escucharon en la casa de la familia tras conocerse la noticia, indica El Mundo.
Cercanos a los padres del niño dijeron que ahora los hermanos descansarán juntos, ya que Julen será enterrado junto a Oliver.
La policía informó que durante esta jornada se realizará la autopsia al cuerpo para determinar la causa de la muerte del niño y que tras el rescate empieza el proceso de investigación para determinar a los responsables del fallecimiento de Julen.
