Una situación realmente horrible está viviendo una familia de Georgia en EEUU, que ha tenido que soportar un doble dolor tras el asesinato del padre. Pues un empleado de una morgue se tomó una foto con la cabeza del cadáver.
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El pasado 8 de noviembre Robert Page fue reportado como desaparecido y sus cercanos pasaron horas de angustia.
Gracias a un video de vigilancia de un vecino, la policía pudo encontrar sus restos y acusar a Christian Ponce-Martinez de su muerte en circunstancias espantosas. El sujeto mató al hombre de 76 años, descuartizó el cuerpo y tras ello lo escondió.
La familia de a poco fue superando el dolor de la pérdida, sin embargo toda la angustia y rabia resurgió en los últimos días luego de que se revelara una perturbadora foto.
En ella, un trabajador de la Oficina de Investigaciones de Georgia aparece sonriendo y sosteniendo la cabeza del anciano, señala WSB-TV 2 Atlanta.
Al darse a conocer la imagen se inició de inmediato una investigación interna, y el organismo aceptó las renuncias tanto del sujeto que tomó la foto como del que sale sosteniendo la cabeza.
“Es tan malvado como el asesino”, dijo Reba Sánchez, la hija de Robert y se preguntó si ver la cabeza de su padre en un refrigerador no había sido suficiente para el empleado de la morgue: “¿ahora la tomas y te tomas fotos?”.
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La mujer además, dijo que era inexplicable que a ambos sujetos, de los cuales no se ha revelado su identidad, no fueran echados de sus trabajos y que en vez de eso hubieran aceptado sus renuncias.
“La renuncia es demasiado buena, es casi como una admisión de lo que hicieron no estaba realmente mal. No tienen corazón”, agregó.
