El presidente de Turquía anunció que el asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi fue premeditado y luego un medio de comunicación dio a conocer que se habría encontrado partes del cuerpo del profesional en casa del cónsul saudí, quien salió del país sin previo aviso.
Las autoridades sauditas han reiterado que no saben dónde se encuentra el cadáver del reportero, aún después de admitir que había muerto en «una pelea» dentro de la sede diplomática.
El medio señala, citando a una fuente no identificada, que el periodista fue cercenado, se le desfiguró el rostro y habría sido enterrado en el jardín del la casa del cónsul de Arabia Saudita, Mohamed Otaibi, ubicada en Estambul.
Erdogan también reclamó a Riad que entregue a los 18 sospechosos que ha detenido para que los juzguen los tribunales turcos, lo que da lugar a nuevas complicaciones con el gobierno saudí, que dice estar realizando su propia investigación para castigar a los implicados.
El presidente turco no mencionó al príncipe saudí Mohammed bin Salman en su discurso, aunque funcionarios vinculados con él han sido implicados en el crimen.
Khashoggi, quien tiene permiso de residencia en Estados Unidos y escribió varias columnas para el Washington Post en las que criticó al príncipe Mohammed, desapareció el 2 de octubre luego de ingresar al consulado saudí en Estambul para realizar un trámite.
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