La presidenta de la Asamblea Nacional, Elizabeth Cabezas, anunció ayer 21 de octubre que el Legislativo ejercerá un «control político» en el caso la fuga de Fernando Alvarado, exsecretario de Comunicación de la administración de Rafael Correa.
En medio de rumores sobre la fuga, y poco antes de que el secretario de Comunicación de la Presidencia, Andrés Michelena, confirmara el hecho, la presidenta de la Asamblea ya anunciaba que el pleno convocaría a las autoridades responsables del caso para que expliquen las acciones u omisiones en la fuga.
Al filo de la medianoche del sábado, la Policía encontró el dispositivo electrónico averiado en una quebrada en una vía que bordea Quito.
La ministra del Interior, María Paula Romo, subrayó que no tienen evidencia de que Alvarado haya abandonado Ecuador pero comentó que investigarán todas las hipótesis sobre su posible salida del país.
Pese a ello, reveló que se ha emitido la difusión azul de Interpol por lo cual ahora el exsecretario de Comunicación puede ser buscado en 192 naciones.
En medio de investigaciones sobre el presunto mal uso de dinero público, la justicia ordenó a principios de agosto varias medidas cautelares para Alvarado, entre ellas el uso de un grillete electrónico (dispositivo de localización), la presentación cada 15 días ante la autoridad competente y prohibición de salida del país.
Según la Secretaría de Comunicación, Fernando Alvarado acudió el pasado viernes a firmar el libro de asistencia en la Corte Provincial de Justicia de la provincia del Guayas.
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