El 18 de octubre un hombre fue capturado en la ciudad de Barranquilla, Colombia, que se presume que tenía encerrados a siete venezolanos. El supuesto sacerdote obligaba a grabar escenas de sexo para luego transmitirlas y venderlas por internet.
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En un operativo conjunto de la Policía Nacional de Colombia y la Fiscalía fue capturado José Luis Aduén Uribe, quien es investigado por los delitos de constreñir a la prostitución y concierto para delinquir.
El sacerdote fue denunciado, luego de que una de las presumibles víctimas huyera y diera aviso a las autoridades. Durante el allanamiento los policías encontraron en el sitio computadores, cubículos y mobiliario para grabar las escenas sexuales.
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La denuncia
Según la denuncia implementada en la fiscalía, el hombre que obligaba a venezolanos a tener escenas de sexo se hacía pasar por integrante de una comunidad religiosa y los contrataba para que tuvieran sexo entre ellos para luego ser transmitido en la red. Los afectados señalaron que el acusado les pagaría 70.000 pesos diarios. Ellos nunca vieron el dinero, y además aseveraron que el sujeto los mantenía cautivos bajo amenazas.