Al acercarnos al terminal de Carcelén, logramos evidenciar una afluencia de ciudadanos venezolanos que se distribuían en distintas partes del sector para comerciar productos. Otros, al contrario, se colocaban a un lado de la calle con carteles que explicaban su situación y la necesidad de ayuda.
Ya en el sitio en el que habitan, conocimos las historias de algunos que promulgaban un largo camino en búsqueda de un mejor futuro. Perú era un factor común en sus conversaciones. Las oportunidades que este país les ofrece son mejores, sostenían.
Edgar Ramón Cordero, venezolano que habita el campamento, nos comentó su trayecto hasta Ecuador. Desde Venezuela tomó un bus hacia la frontera, caminó desde el puente de Rumichaca hasta Quito.
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«Durmiendo a la orilla de la carretera o donde le agarraba la noche», comentó el hombre.
Llegó al albergue y al cabo de tres días, salió a Perú. Por falta de documentos no pudo ingresar y retornó a la capital ecuatoriana. Hoy, espera el apoyo para volver a Venezuela, Cordero quiere visitar a su madre quien se encuentra delicada de salud.
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Tratando de ser un poco más incisivos en su diario vivir, preguntamos sobre las formas en las que se consiguen los recursos de alimentación, medicación e higiene. Para lo primero, nos comentaron que los ecuatorianos son quienes se encargan de ayudar con productos y dinero. Esta ayuda les permite solventar esta necesidad.
En cuanto a la medicación, Miguel Ochoa es uno de los paramédicos venezolanos que se encargan de ayudar a a sus compatriotas con revisiones periódicas. Con estos chequeos logra detectar enfermedades antes de que alcancen un punto crítico. La tercera, de higiene, está cubierta por el Municipio de Quito. El Cabildo implementó baterías sanitarias portátiles en las afueras del refugio improvisado.
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Venezolanos en Carcelén: Cuatro familias fueron reubicadas esta mañana
La falta de una estabilidad laboral no les permite conseguir un alquiler en el que puedan vivir adecuadamente. La inseguridad también es un factor importante, gracias a riñas que se han ocasionado por diferentes razones, exponiendo la integridad de las personas del campamento.
Hoy, 21 de agosto, cuatro familias fueron reubicadas a los diferentes albergues distribuidos en la capital. En estos lugares se encuentran personas de atención prioritaria como niños, niñas y una mujeres embarazadas.
La situación dentro del refugio improvisado en Carcelén
Christian Rivera, director del COE, nos informó que el Municipio de Quito, a través de la Secretaría de Inclusión, se encuentra aplicando el plan para grupos de atención prioritaria, quienes serán reubicados en los CTT (Centro de Tránsito Temporal).
Además serán dirigidos al albergue San Juan de Dios, otorgándoles seguridad y dignidad. En el lugar se pretende evitar que estén expuestos a situaciones de violencia sexual, microtráfico, entre otras cosas.
De igual forma, se señaló que se busca dar atención humanitaria y recuperar el espacio público.
Al momento tanto el Gobierno Nacional, el Gobierno local y el sistema de la ONU están buscando mejores condiciones de vida en cuanto a movilidad de los venezolanos en Ecuador.
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