El fiscal general, Paúl Pérez Reina, pidió hoy a la Corte Nacional mantener la condena de 6 años impuesta al exvicepresidente Jorge Glas por el delito de asociación ilícita en la trama de sobornos de Odebrecht, en una audiencia en la que este último pidió su anulación por falta de pruebas.
«La fiscalía, cumpliendo con su deber, ha solicitado que se rechacen los recursos de apelación y se confirme la sentencia que ha subido en grado y que se ratifique la imposición de la sentencia», dijo el fiscal en una breve comparecencia al terminar hoy la sesión de apelación. Tras ocho horas de debates, Pérez Reina también dijo haber insistido para se mantenga la «reparación integral» al Estado ecuatoriano por los daños causados por el exvicepresidente. El abogado y exasambleísta Cesar Montúfar, parte de la acusación, dijo que la reparación que los jueces deben exigir a Glas la han calculado en siete millones de dólares. «El Estado fue afectado y debe ser reparado. No basta que esté en la cárcel con una sentencia, debe devolver el dinero al pueblo ecuatoriano. Para nosotros siete millones que debe devolver por este juicio, solo por este juicio», subrayó ante los medios. La audiencia ha quedado suspendida sin que se haya ofrecido la fecha para que los jueces se pronuncien El exvicepresidente compareció ante la Corte Nacional de Justicia para apelar la condena de seis años de cárcel que le fue impuesta el año pasado por el delito de asociación ilícita en la trama de sobornos de Odebrecht. Frente a la sede del tribunal, ubicada en el norte de Quito, se dieron cita decenas de simpatizantes del exmandatario, a los que Glas saludó antes de entrar. En el procedimiento se personaron correligionarios como el excanciller Ricardo Patiño y la legisladora Sofía Espín, que han reiterado la «inocencia» de Glas y aducido que su encarcelamiento es fruto de una supuesta persecución política y mediática. Por su parte, el expresidente Rafael Correa llamó a sus seguidores través de un video difundido en Twitter a concentrarse frente a la Corte Nacional «para respaldar a nuestro compañero Jorge Glas Espinel, en una audiencia de apelación frente a la injusticia que se está cometiendo» y lo calificó como «preso político» y «hombre inocente». Glas entró en prisión a principios de octubre pasado, en pleno proceso judicial por su supuesta implicación en el entramado de sobornos de la constructora brasileña, y fue oficialmente destituido como vicepresidente en enero pasado por ausencia efectiva del cargo. Su defensa ha cuestionado hoy los mecanismos empleados para destituirlo y aduce que la pena de seis años de cárcel a la que fue condenado en diciembre tras ser declarado culpable por la Sala de lo Penal de la Corte Nacional por el delito de asociación ilícita, no tenía base legal al sustentarse en un código derogado. La Fiscalía General había pedido en el juicio la pena máxima al considerar probado que Glas se benefició de 13,5 millones de dólares en sobornos por parte de Odebrecht para la adjudicación de cinco contratos de obra entre 2012 y 2016, cuando estaba a cargo de sectores estratégicos durante el Gobierno de Correa. El Ejecutivo ecuatoriano informó ayer de que ha resuelto la retirada de la custodia que proporcionaba hasta la fecha a Glas y a Correa al considerar la medida innecesaria. EFE Relacionado: