Cara Creaby, una policía de 29 años, asegura que vive sufriendo «pesadillas» y teniendo «flashbacks horribles» tras ser obligada a observar más de 100 videos de violaciones a menores en el marco de una investigación.
Según informa The Sun, la oficial demandó a la propia policía por este hecho, pidiendo una indemnización de 200 mil libras esterlinas (más de 160 millones de pesos chilenos), aduciendo que todo le provocó una serie de «lesiones siquiátricas».
La mujer indicó que el 2009 ingresó a la Unidad Zafiro, área que se encarga de indagar denuncias de abusos sexuales a menores. En ese sentido, le dieron la tarea de investigar a Michael D’Costa, un hombre acusado de haber ultrajado a tres niños.
En el marco de la investigación dio con un diario del sujeto y más de 100 videos de abusos a menores, los cuales debió revisar. En las cintas, aparte de los ataques, se veía como el sujeto trataba de manera despectiva y humillantes a los pequeños, los mismos que ella debió entrevistar después y acompañarlos en el proceso judicial.
Tras la operación, la mujer intentó abandonar dicha unidad y habló con sus jefes en Scotland Yard, pero la conminaron a seguir.
Creaby asegura que dicha tarea le arruinó su vida sexual y que fue diagnosticada con trastorno de estrés postraumático. Además, a cada instante se le vienen a la cabeza los recuerdos de las escenas de los videos.
Finalmente, el 10 de mayo del 2015 se le dio de baja en la policía por «enfermedad y no pudo continuar debido a sus lesiones siquiátricas». Al respecto, su abogado indicó en el escrito de la demanda a Scotland Yard que «se alega que sus lesiones fueron causadas por su participación en la investigación de la explotación sexual de tres niñas y por la visualización excesiva de material fotográfico y de video dañino relacionado con la explotación sexual infantil».
«Hubo una ausencia de evaluaciones de riesgos y vigilancia de salud y seguridad que la habrían protegido del riesgo de daños siquiátricos previsibles y de no haberle brindado asistencia para tener que emprender un trabajo difícil y desgarrador», expresó.
La Federación de oficiales de policía está brindando apoyo a la mujer, afirmando que si bien «a fin de investigar algunos de los delitos más graves, existe una necesidad reconocida de que los investigadores vean algunas de las imágenes más desgarradoras, perturbadoras y angustiantes imaginables», precisaron que «el efecto que la visualización de dicho material puede tener en los funcionarios debe reconocerse y es vital que los funcionarios, especialmente los que asumen este tipo de roles, cuenten con supervisión, supervisión y asistencia apropiadas y continuas en el lugar de trabajo para proteger su propia salud y bienestar, y que se realicen todas las evaluaciones de riesgos y controles necesarios para salvaguardarlos en sus roles «.
Por último, Scotland Yard solamente se remitió a indicar que «el Servicio de Policía Metropolitana ha recibido una demanda por daños y perjuicios causados por lesiones psiquiátricas del 22 de febrero de 2018. El reclamo está siendo revisado actualmente por abogados».