El alcalde de Quito recorrió los trabajos de reparación del canal del río Pita-Puengasí. Alrededor de 100 empleados de la Empresa Metropolitana de Agua Potable continúan con los trabajos de reparación del canal de agua del río Pita-Puengasí, que resultó averiado el miércoles 6 de diciembre por un deslizamiento.
De acuerdo a los establecido por el equipo de ingenieros, ya realizó la reparación de los tramos afectados por la caída de 100 mil metros cúbicos de tierra.
Ayer, 7 de diciembre de 2017, se cumplió con la fundición de las paredes del canal, luego se entró a la fase de fraguado, con un aditamento acelerante que duró aproximadamente ocho horas.
La siguiente fase que se está ejecutando desde primeras horas de este viernes, consiste en armar una cobertura de losetas. Es una estructura que protegerá de la contaminación e incluido del robo del líquido.
El alcalde de Quito, Mauricio Rodas, realizó un recorrido por la zona para constatar los trabajos. Ahí declaró que ya se restableció el servicio de agua en varios puntos, pero a medida de las horas se restablecerá en los demás puntos de la ciudad, mientras tanto seguirá el apoyo con los tanqueros.
«En aquellos sectores en donde no existe servicio normal focalizaremos el servicio de los tanqueros. Es una cuestión de horas para que el servicio se normalice», indicó.
El funcionario advirtió que en primera instancia se estimó que el servicio empezaría a normalizarse en horas de la tarde. No obstante, empezó a fluir desde las 03:00 de este viernes.
«Más de un 50% de las zonas afectadas ya cuentan con servicio normalizado de agua potable y a medida de que transcurran las horas de hoy viernes, se contará con el servicio normalizado», aseguró.
El alcalde también se refirió a la investigación que se inició para determinar las causas del deslizamiento. Adelantó de indagaciones preliminares señalan que habría una negligencia por parte de la empresa administradora de escombrera que habría sobrecargado el cubeto sur.
A decir de Rodas, de confirmarse este hecho se tomarán acciones legales incluyendo la posibilidad de dar por terminado unilateralmente el contrato de manejo de la escombrera El Troje.
Fuente: El Telégrafo
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