Las fotomultas y los fotoradares son algunos de los mecanismos que utiliza la Agencia Metropolitana de Tránsito para multar a los infractores que no respetan los límites de velocidad, el semáforo en rojo, los cruces seguros y el carril exclusivo, sin embargo pocos saben cómo funcionan las multas electrónicas.
Los medios electrónicos que detectan las infracciones de los conductores se instalaron en Quito desde el 2015. Desde entonces avenidas como la Simón Bolívar, Ruta Viva, Mariscal Sucre y Panamericana Norte cuentan con radares fijos; y ejes viales como la Eloy Alfaro, 6 de Diciembre, 10 de Agosto entre otros cuentan con cámaras que detectan las fotomultas.
Las infracciones son captadas y detectadas a través de cámaras, en el caso de los fotoradares son dos fotografías y para las fotomultas es un video y tres fotos. Pasan al Centro de Gestión de la Movilidad (CGM) donde se verifica la infracción cometida, el número de placa, cédula de identidad y la fotografía.
La infracción se sube al sistema y se notifica al responsable a través de: correo electrónico, mensajes SMS, Courier o página Web de la AMT.
Se puede impugnar en un juzgado de tránsito después de tres días laborables, se debe realizar con un abogado o con un defensor público.
Si se asume la multa, debe ser cancelada en las agencias del Banco del Pacifico con número de cédula o placa del vehículo.
Al ser una infracción captada por medios electrónicos no hay disminución de puntos a la licencia.
Fuente: Prensa Quito
TE PUEDE INTERESAR:
