Ocho meses de investigación le tomó a la Empresa Municipal de Turismo levantar información en Guayaquil, con el fin de elaborar el Plano Gastronómico de la ciudad donde destacan sus restaurantes y huecas.
Gloria Gallardo, quien preside la cartera de turismo municipal, comparte que 30.000 mapas se entregarán como ejemplares en toda la ciudad.
“Es el primer mapa gastronómico de Guayaquil, está diseñado para ser muy funcional, está el nombre de la hueca o restaurante, su dirección, cómo llegar, entre otros datos de utilidad para guayaquileños y turistas”, comparte Gallardo.
Raul Zucunota Guevara , editor turístico, comparte que este plano está preparado con las 160 huecas que participaron desde el 2014 al 2016 en Raíces.
“Quienes levantaron la información fueron jóvenes estudiantes de las escuelas de gastronomía, además, de funcionarios de la Municipalidad de Guayaquil, la Dirección de Salud, entre otras instituciones”, dice el funcionario.
A cada hueca se la capacitó y se le brindó las condiciones óptimas en salud para que estuvieran presente en el plano.
“Se les buscó un auspiciante que permitió que el local recibiera arreglos, porque estos espacios deben de estar aptos para el turista que llega a visitarlos”, señala Zucunota.
Comenzó vendiendo un pollo, hoy vende 60
Ruth Alvia, propietaria de Las Alitas del Guasmo, un negocio con 16 años de historia, comparte que comenzó “por necesidad” vendiendo las presas que salen de un pollo acompañado con arroz y menestra.
“Soy madre soltera de tres niñas y me vi obligada a emprender, lo que sabía era cocinar. Así que comencé”, cuenta.
Con el pasar de los años la guayaquileña comenzó a ganar popularidad, la voz se corría de que en “Las alitas del Guasmo” se comía delicioso. “Con la bendición de Dios las cosas iban mejorando y con el pasar de los años cada vez era más grande, tuve que abrir un local y así hasta lo que es hoy”, cuenta Alvia.
Actualmente, son 70 pollos semanales los que se venden en este local en diferentes presentaciones. Hace pocos días, Alvia recibió una beca por parte del Municipio de Guayaquil para que se especialice en una de las escuelas de chef que hay en la ciudad.
La colada morada que se despacha todos los días
Elena Naranjo, propietaria del local “Colada morada” no puede esconder la emoción que siente por haber ganado una beca por parte del Municipio de Guayaquil para que se especialice en una escuela de chef.
Hace 17 años ella empezó a vender colada morada en un mercado ubicado en las calles Guaranda y Fco. De Marco.
“Al principio me pareció una locura vender colada morada todos los días, porque lo normal es despacharla solo en noviembre, pero la idea fue dando resultado y la venta aumentó”,
Naranjo comenta que empezó vendiendo 100 vasos dirios y actuamente llega a 400 vasos la venta diaria. “En temporada (noviembre) vendo hasta 3 mil vasos”, dice contenta.