En perfectas condiciones y totalmente intacta, así es como se encontró el que puede ser uno de los más grandes hallazgos en la historia reciente. Se trata de la momia del que sería sirviente en el templo de un faraón, en Egipto.
Esta semana, un equipo de egiptólogos españoles encontró la momia de un «Sirviente de Palacio». Estaba en el templo del faraón Tutmosis III y corresponde al período de la Dinastía XVIII.
Aunque del sarcófago en realidad no quedaba nada; pues se lo comieron las termitas, lo que alguna vez hubo en su interior fue lo que maravilló a los investigadores. Una momia perfectamente bien conservada, adornada con símbolos solares, la cobra y las diosas protectoras Isis y Neftis. El descubrimiento se hizo en la región sureña conocida como Lúxor.
Aquí, la investigadora Myriam Seco trabaja desde hace nueve años y de acuerdo a sus investigaciones, la tumba podría ser del Tercer Periodo Intermedio. Esto significa que tendría al menos unos tres mil 200 años de antigüedad.
«Se llevarán a cabo mayores investigaciones para establecer la cronología de la tumba», explicó Mahmoud Afifi, director del Departamento del Antiguo Egipto en el Ministerio de Antigüedades.
Es «una humilde tumba de momia»
Así la definió Javier Martínez Babón, parte del proyecto Tutmosis III. En entrevista con el periódico español ABC resaltó la riqueza del cartonaje y dijo que conserva una variación de colores «preciosa» y que «no se corresponde con la sencillez de la tumba».
Además, por los vistos de la misma, no se trata de una persona que haya sido parte de la nobleza, pero sí alguien con «cierta holgura económica». «Gracias a los detalles se han identificado que fue un ‘Sirviente de la Casa Real’ llamado Amon Renef», añadió el investigador.
Ahora será estudiada
El equipo de arqueólogos logró sacar de la tumba a la momia. Para ello, tuvieron que cubrirla cuidadosamente con gasas y espuma. Una operación totalmente llena de tensión. Sin embargo, se logró con éxito.
«Será interesante hacerle un escáner de rayos X para observar a la momia», comentó Myriam Seco al citado periódico.