En la normativa ecuatoriana se establece que cualquier persona natural o jurídica que preste servicios de telecomunicaciones necesita una concesión del estado Ecuatoriano.
Esa concesión se consigue a través de la Agencia de Regulación y Control de las Telecomunicaciones (ARCOTEL). Sin esta condición las personas que prestan los servicios se consideran ilegales o clandestinos.
En 2014, la Superintendencia de Telecomunicaciones (Supertel) -que ya no existe- puso en marcha el control de las antenas piratas. Así, evitar el robo de la señal.
Delito
Eso conlleva a una sanción penal que incluye la reclusión de tres a cinco años.
Piratas
Para detectar cuáles son antenas piratas, ARCOTEL podría verificar la identificación de que las antenas sean de las entidades de servicio correspondiente y que tengan el permiso correspondiente par prestar el servicio en Ecuador.