Un niño de 6 años que murió como consecuencia de los disparos que realizó un adolescente en una escuela primaria de Townville la semana pasada.
El menor fue enterrado hoy, miércoles 5 de octubre de 2016, en un funeral al que asistieron cientos de niños y adultos vestidos con trajes de superhéroes.
Jacob Hall, fue uno de los alumnos heridos en el ataque perpetrado en la escuela primaria de Townville, estado de Carolina del Sur, el 28 de septiembre y en el que también resultó herida una maestra.
Después de tres días en estado muy grave, el niño murió el sábado en el hospital de la ciudad. La bala había ingresado en una arteria principal en la pierna y el niño había perdido mucha sangre.
Renae Hall dijo que a su hijo le encantaban los superhéroes, por lo que vistió y enterró a Jacob con el disfraz de Batman. La madre pidió además que familiares y amigos también fuesen disfrazados al funeral, según informó la televisión local WYFF.
Más de 1 500 dolientes se reunieron en la ciudad para el entierro disfrazados con trajes de distintos personajes. También el gobernador Nikki Haley y el senador estadounidense Tim Scott asistieron al funeral.
¿El agresor?
El presunto agresor, un joven de 14 años, se encuentra detenido. Poco después del incidente, la policía encontró a sólo cuatro kilómetros de la escuela, al padre del joven muerto de un disparo.
Las otras dos víctimas están fuera de peligro, según las autoridades. Unos 300 menores frecuentan la Townville Elementary School, en edades que se extienden desde el jardín de infancia hasta sexto grado.
Los incidentes con armas son frecuentes en Estados Unidos, pero no en escuelas primarias. En diciembre de 2012 tuvo lugar un trágico tiroteo en la primaria de Sandy Hook en Newtown, Connecticut, que dejó 20 niños muertos entre los 26 fallecidos.
Fuente: Agencias