La interrupción del servicio eléctrico ocasionó que los cielos lucieran notablemente limpios de contaminación lumínica a través de toda la Isla, y produjo la posibilidad de apreciar gran cantidad de estrellas incluso desde el área metropolitana.
La Sociedad de Astronomía del Caribe (SAC) explicó que los intentos para controlar la contaminación lumínica no pretenden o significa que estemos a oscuras. “Muchos creen erróneamente que al intentar reducir la contaminación lumínica se intenta eliminar alumbrado o afectar la seguridad, pero no es así”, indicó la organización, que destacó que incluso desde San Juan se pudo captar la Vía Láctea.
El organismo enfatizó que el principal problema es que hay demasiadas luces que no están apuntando hacia abajo, que es donde se necesitan.
“No hace sentido iluminar hacia el cielo. Hay estudios que demuestran que en muchos focos del alumbrado público, cerca del 60 por ciento de la luz emitida se pierde hacia el cielo. Esto equivale a que estamos gastando 60 centavos de cada dólar para alumbrar hacia el cielo”, explicó la entidad educativa.
“Si toda iluminación exterior es reenfocada hacia abajo, tenemos mayor seguridad y tal vez con menos luces, por lo que se ahorraría dinero. Incluso se requería producir menos electricidad y se afectaría menos el frágil sistema eléctrico que actualmente tenemos”, indicó.
La SAC señaló que si se logra reducir la contaminación lumínica, se asegura que el sistema eléctrico tenga menor demanda de producción. Aunque algunas carreteras necesitan mejor iluminación, existen otras que tienen demasiadas luces, unas muy cercanas a otras.
“En zonas donde hay demasiados postes se puede intercalar el alumbrado, es decir apagar uno entre cada dos postes”, agregó.
También existe la alternativa de utilizar sensores similares a los existentes en semáforos, para que ciertas luces de los postes se apaguen cuando el tráfico es menor.
“Otra opción es añadir reflectores que facilitan apreciar los carriles en carreteras oscuras. Todos deseamos tener electricidad en nuestros hogares, pero no por eso tenemos que lucir como un bombillón de halógeno desde el espacio”, indicó la entidad educativa.
