Un equipo de científicos creó un micrófono especial para registrar los sonidos que emiten los delfines en la piscina de la Reserva Natural Karadag, en Ucrania. La conversación fue grabada por un hidrófono, que es un micrófono que puede utilizarse bajo el agua, capaz de distinguir entre distintas voces.
Al estudiar la grabación, los especialistas notaron que Yasha y Yana conversaban entre ellos como dos personas.
Los investigadores del Karadag Nature Reserve en Feodosia aseguran que cada uno de los “delfines nariz de botella” pausaba cuando el otro estaba “hablando”, hasta responder y que se podrían reconocer palabras en el sonido, reseñó el portal La Opinión.
Aunque todavía no pueden explicar qué se dicen, según el principal autor del estudio, el doctor Vyacheslav Ryabov, esta demostración confirma que los delfines tienen un lenguaje propio y que esto podría ayudar a desarrollar una manera de comunicarse con ellos.