Para el 2020 el 75% de la fuerza de trabajo será millennials (generación comprendida entre los años 1980 y 2000), por ello, las organizaciones a nivel mundial se preparan ya para enamorar, atrapar y trabjar con estas personas, caracterizada por ser emprendedores, competitivos, optimistas, críticos, curiosos y la calidad de vida es su prioridad.
La bloguera Carola P. Badua, habla de 7 claves para enamorar a un millennials, mismas que las detallamos a continuación para su interés:
Transparencia: En primer lugar. Sin duda. Siempre ha sido un valor importante pero, hoy en día, gracias a las redes sociales, es más trascendental que nunca. Tus perfiles sociales, vídeos, página web y cualquier otra ventana al mundo, debe ser lo más fidedigna posible a la realidad, a tu día a día. Es la mejor forma de mostrar la personalidad de tu empresa y que el talento se pueda enamorar de ella.
Comunicación: Muy ligada a la transparencia, la comunicación debe ser una pieza estructural en la cultura empresarial y debe fomentarse siempre. La dirección debe estar al servicio del talento y resolver todas sus dudas para que pueda desarrollar las mejores ideas para la organización, y también debe fomentarse un clima abierto en el equipo.
Ética: Tendencias como la comida orgánica, el consumo responsable o el reciclaje no son aisladas ni pasajeras sino que muestran una preponderancia creciente de los valores por encima de la comodidad o el beneficio propio. El talento considera vital saber que su trabajo aporta algún beneficio a la sociedad.
Un 64% de los millennials dice que es una prioridad para ellos hacer del mundo un lugar mejor para vivir.
Confianza: ¿De verdad necesitas buscar al mejor empleado si después no vas a confiar en él? Los millennials necesitamos poder desarrollarnos sin presiones, más allá de unas directrices claras. Solo así lograrás que demos lo mejor de nosotros mismos.
Si no estás dispuesto a confiar en nuestro criterio y vas a controlar hasta las horas que trabajamos, el talento millennial también saldrá corriendo.
Espíritu colaborativo: Tu empresa debe siempre fomentar el trabajo en equipo y la colaboración entre empleados. Al talento le gusta dedicar su tiempo a crear proyectos, ser creativo y tener un buen clima laboral, no estar compitiendo con sus compañeros. Esa mala energía hará que pierda la motivación y termine por salir corriendo, esta vez con la cabeza baja por el desgaste…
Valorar: Tienes un empleado motivado, responsable, que se identifica con los valores de tu empresa… entonces, ¿por qué no le pagas lo que se merece? La relación con tus empleados no puede ser de rivales, al igual que ellos te regalan su tiempo, conocimientos y habilidades, es justo que seas honesto y la retribución sea beneficiosa para ambos. De acuerdo que el salario ya no es una prioridad para nosotros, pero también nos gusta sentirnos valorados.
Descubre los talentos ocultos de tus empleados: La última clave y, una de las más importantes, nunca olvides que todos tenemos talentos ocultos que, con la visión y empuje suficiente, pueden desarrollarse. Así que, conoce bien a tus empleados, motívalos y sé una especie de descubridor de talentos.
Tus empleados serán más felices, se sentirán más realizados y tú tendrás el talento que tu organización necesita.
