Vivo pero muerto? Las personas que padecen esta extraña y poco usual enfermedad, están convencidos de que han muerto y se ven a sí mismos como muertos vivientes o zombies. La introspección de su enfermedad es tan profunda que afirman sentir que no tienen sangre, ni cerebro, ni órganos y que perciben incluso el olor de su carne pudriéndose.
Este delirio, relacionado con la hipocondría, arranca con la negación de la existencia, primero de todo lo que les rodea y, posteriormente, de su propia existencia, reseñó el portal Muy Interesante.
Entre los síntomas más comunes se encuentran: la depresión, la automutilación, los pensamientos suicidas, la analgesia o ausencia de dolor, la creencia de su cuerpo está muerto y se está descomponiendo por ello o incluso que son inmortales.
Esta enfermedad, que aparece de forma repentina, es común en las depresiones más graves, ya sean psicóticas o delirantes, y puede encontrarse en otras enfermedades mentales como la esquizofrenia y la psicosis.
Origen de Cotard
Jules Cotard fue el neurólogo francés que descubrió este síndrome, bautizándolo inicialmente como “delirio de negación” en 1880. Cotard expuso su hallazgo en una conferencia en París, mediante el caso de una paciente que negaba la existencia de Dios y también del diablo, no veía necesidad de comer y negaba la existencia asimismo de algunas partes de su cuerpo, convencida de que no podría morir de forma natural.