Van Terry, un hombre de Ohio, Estados Unidos, tuvo que declarar en el juicio del asesino de su hija Shirellda , quien murió cuando solo tenía 18 años. Sin embargo, el dolor de su perdida hizo que no mantuviera la cordura y lo atacar.
Michael Madison estaba siendo juzgado por asesinar a tres mujeres en 2013, incluida la hija de Terry.
Durante el dictamen, el acusado adoptó una actitud desafiante y provocadora, pero fue una sonrisa lo que detonó que Terry decidiera lanzarse hacia él.
Justo antes de la agresión, era el turno de Terry para hablar frente al juzgado. Durante su intervención, él señaló que se suponía debía encontrar en el fondo de su corazón el perdón para el hombre que había matado a su hija.
A continuación, se dio la vuelta y vio que Madison sonreía. De este modo, se lanzó hacia su cuello y poco le importó que la sala estuviera llena de policías, cámaras y magistrados.
Enseguida, varios policías y otros presentes actuaron para separarlos. Cerca de siete personas fueron necesarias para detener el ataque de Terry y tranquilizarlo, al mismo tiempo un policía alejo del lugar al asesino para evitar que la provocación continuara.
Según relató la hermana de Terry a la cadena estadounidense “Fox 8”, él no pudo soportar la escena, por lo que perdió los estribos.
Tomarse la justicia por su cuenta no causa nada bueno y menos dentro de un juzgado. Debido a lo ocurrido, el Fiscal del Condado está decidiendo si presentar o no cargos contra el padre por la agresión.
A pesar del incidente, el juicio pudo continuar. Madison fue condenado a muerte por haber asesinado a Angela Deskins, Shetesha Sheeley y Shirelida Terry hace tres años.
Entre los 14 cargos por los que fue sentenciado Michael Madison, de 38 años, se incluyen: asesinato, violación y secuestro.
Los cuerpos de las víctimas fueron encontrados dentro de bolsas para la basura hechas de plástico en Cleveland.
Las autoridades encontraron a la primera víctima en julio de 2013, luego que se reportaran quejas sobre el mal olor que se desprendía desde el estacionamiento del apartamento donde vivía. Los otros dos cuerpos fueron hallados al siguiente día en una zona cerca.
