Donald Trump ha triunfado en distintas primarias, acercándose cada vez más a la nominación presidencial del Partido Republicano.
Sin embargo, encuestas recientemente publicadas por NBC/Wall Street, señalan que el 70% de las votantes estadounidenses tienen una opinión negativa de Trump.
Lo que significa que sus acciones lo han distanciado de un sector de votantes que podría ser determinante para su campaña.
Principalmente, después de comenzar atacar a la esposa de su competidor, Ted Cruz. Sus comentarios han sido criticados hasta por sus seguidores republicanos.
El martes 22 de marzo, después de que se publicara un mensaje contra Trump en el que aprecia su esposa semidesnuda, el magnate decidió amenazar con «decir la verdad» sobre Heidi Cruz.
Posteriormente, retuiteó una foto que no favorecía a la esposa de Cruz, que se acompañaba por la frase: “una imagen vale más que mil palabras».
No obstante, Heidi Cruz no ha sido la única mujer atacada por Trump.
Anteriormente,y durante un debate, el millonario tuvo una disputa con la presentadora de Fox News, Megyn Kelly, después de que lo interrogara sobre su historial de insultos a diversas mujeres.
El magnate no dudo en llamarla «mentirosa» y «sobrevalorada».
Durante ese mismo debate el político afirmó que había llamado a la comediante Rosie O’Donnell, «cerda gorda».
También criticó el rostro de su antigua rival, la republicana Carly Fiorina. “Miren esa cara. ¿Quién se atrevería a votar por alguien así?”, dijo Trump a la revista Rolling Stone.
En esta lista también se encuentra la precandidata del Partido Demócrata, Hillary Clinton, a quien etiquetó como “asquerosa” por utilizar el sanitario durante una pausa comercial en un debate demócrata. Además, aseguró que Hillary no satisfacía a su marido.
