Los medios belgas informan que una de las explosiones en el aeropuerto ocurrió cerca del mostrador de la compañía American Airlines y otra junto a la cafetería Starbucks.
Imágenes muestran una columna de humo sobre una de las terminales del aeropuerto y a decenas de personas que salen corriendo del lugar.
El aeropuerto ha sido evacuado, los vuelos desviados y el servicio de tren hacia él cancelado.
La seguridad ha sido reforzada tanto en el aeropuerto de Bruselas como en el de Fráncfort, en Alemania, y los de Heathrow y Gatwick, en Reino Unido.
Asimismo, las autoridades han ordenado el cierre de la red de metro, así como el de las tres principales estaciones de tren.
Los autobuses y tranvías tampoco están circulando en la ciudad.
Y también ha sido suspendido el servicio del Eurostar, el tren de alta velocidad que comunica Londres con Bruselas, y el de Thalys, el ferrocarril que opera entre Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo.
Las autoridades han decretado la «máxima alerta terrorista», de nivel 4, en todo el país.
La frontera entre Francia y Bélgica ha sido cerrada.
«Es un ataque a toda Europa», dijo el presidente de Francia, François Hollande, en rueda de prensa.
«Los ataques en Bruselas son la manifestación de una amenaza global que exige una respuesta global».