La legalización de la marihuana en algunas ciudades de Estados Unidos ha comenzado a impactar en el mercado y la economía de los cárteles de la droga. Mientras que la industria de la marihuana legal es sin duda el sector de mayor crecimiento de la economía de Estados Unidos (que subió un 74 por ciento en 2014 y tiene un valor de mercado de 2 mil 700 mil millones de dólares), los expertos calculan las pérdidas de los carteles del narcotráfico en millones de dólares.
Aunque no existen cifras precisas de cómo la legalización de la marihuana ha impactado los cárteles de la droga, dos años después de la despenalización en Colorado y meses después de que su uso medicinal y recreativo fue legalizado en otros estados, las cifras indican un descenso significativo en el mercado ilegal de marihuana. La incautación de marihuana en las fronteras de Estados Unidos ha registrado un descenso constante en los últimos tres años, de 2 millones 430 mil libras (mil 102 toneladas) en 2013 a 1 millón 922 mil libras (872 toneladas) en 2014, cayendo hasta 1 millón 538 mil libras (697 toneladas) en 2015, según cifras de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.
En el otro lado de la frontera, el gobierno mexicano ha reportado una disminución de más del 50 por ciento en la erradicación de cultivos de cannabis, que se redujo de 5 mil 364 hectáreas en 2013 a 2 mil 500 hectáreas en 2014. Si se toma en cuenta que el precio de una tonelada de la marihuana en la frontera entre Estados Unidos y México se estima por encima de los 800 mil dólares, las pérdidas para los cárteles son sustanciales.
Además de las cifras oficiales, proporcionadas por los gobiernos deambos países , los expertos coinciden en que la legalización de la marihuana en algunos estados de Estados Unidos (el principal mercado del mundo) está golpeando a los traficantes de drogas e incluso los agricultores que la cultivan.
«La legalización ya está afectándolos y está cortando en sus ganancias. Aunque es difícil decir cuánto, es suficiente para lograr que una gran cantidad de agricultores cambien el cultivo de cannabis en México para otro tipo de cultivos», dijo Sanho Tree, director de the Drug Policy Project.
Las leyes del mercado son predominantemente responsables de afectar las ganancias de los cárteles, ya que ahora se enfrentan a una competencia bien organizada, que también es reconocida y protegida por el Estado. Esta competencia ha llevado a la disminución en el precio de la marihuana en los campos; el precio de un kilo de cannabis se ha reducido de 100 a 30 dólares en los últimos cuatro años, según informes de prensa.
Un nuevo fenómeno sorprendente ha comenzado a presentarse en los últimos años: el contrabando a la inversa. El tráfico de marihuana está en marcha desde Estados Unidos a México, debido a una mayor calidad del producto y la relativa facilidad en la compra legal. «Hemos oído que ya han encontrado la primera evidencia de marihuana que se compra en las tiendas de Estados Unidos y se vende fuera del país», explicó Juan Francisco Torres Landa, abogado y uno de los cuatro mexicanos autorizados a plantar, cultivar y consumir marihuana para uso personal.
Pero no todo es pérdida para los carteles, porque la legalización de la marihuana les ha llevado a diversificar sus operaciones y a intensificar el tráfico de otras drogas a Estados Unidos. Cifras de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos muestran que en sólo un año, el decomiso de cocaína en la frontera de Estados Unidos ha aumentado al doble, de 4 mil 554 libras (2 toneladas) en 2014 a 11 mil 220 libras (5 toneladas) en 2015. «Los grupos criminales que se dedicaban a traficar marihuana hacia Estados Unidos han encontrado otras vías para obtener ganancias a través del tráfico ilícito de drogas, evidentemente la cocaína es el más importante”, dijo en entrevista telefónica Armando Rodríguez, investigador del Colectivo de Análisis de la Seguridad con Democracia (Casede).
Aunque las cifras oficiales muestran una reducción significativa en el flujo de la marihuana hacia Estados Unidos, los expertos y los informes de las agencias de Estados Unidos advierten que los carteles han comenzado a transferir recursos, una vez utilizados para el contrabando de marihuana, a otras actividades de tráfico ilegal de drogas como la cocaína. De hecho, lejos de que Estados Unidos erradique el flujo de drogas ilegales, se está viendo una mayor diversidad de narcóticos que cruzan sus fronteras.