La mejor parte del día para la mayoría de las mujeres es cuando llegan a casa y se quitan el brasier. Para muchas, esta prenda es cómoda pero para otras no tanto. De hecho, el investigador francés Jean-Denis Rouillon asegura que el brasier «no sirve». Pero, ¿cómo saber si el brasier me hace daño?
A la hora de comprar un brasier debes tener en cuenta no solamente en lo sexy que pueda lucir o lo pronunciados que se vean tus senos. Realmente la prioridad es la comodidad y la salud.
La circunferencia de cada seno posee diferentes receptores que los hacen sensibles a variaciones de calor, dolor y presión, así que te presentamos varias señales que indican que tu brasier te hace daño.
- Aprieta demasiado y te causa estrés
- Tela del brasier inadecuada
- No sujeta lo suficiente
- Te hace sentir poco atractiva
- El relleno no es el adecuado
Para elegir un brasier que no te haga daño debes tomar en cuenta cosas como: La talla debe ser la adecuada, las tiras del brasier deben ser ajustadas pero no dejar marcas en tu piel y debes utilizar el adecuado en cada ocasión, de acuerdo con el sitio lavidalucida.
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