No existen candidatos buenos ni malos, como tampoco empresas mejores o peores. Sino más bien hay candidatos que coinciden en perfil y cultura con determinadas empresas y con otras no hay fit.
Diariamente llegan a manos de los headhunters, cientos de CVs y sólo 3 a 5 de ellos se presentan al cliente. La pregunta es ¿qué se mira en un cv y un candidato en la entrevista cara a cara? Y la respuesta es: habilidades técnicas requeridas por el cargo, habilidades blandas que se necesita en esa posición particular, que ese candidato haga fit con la cultura organizacional y que sus patrones de comportamiento se alineen a la jefatura a quién reportará el cargo.
Cuando una empresa externaliza una posición quiere ver 3 a 5 candidatos competentes para el rol, altamente atractiva la experiencia de uno y otro. La contienda no debe ser desigual
Desde Michael Page, Bernardita Espinoza, Consultor en Recursos Humanos, señala que “la instancia final del feedback siempre es productiva al candidato y responde al tiempo y la confianza que éste tuvo al participar en el proceso”, pero es común -y se hace muchas veces para evitar que el candidato pueda alegar discriminación- dar razones no específicas y neutrales, tales como «muchas gracias por ingresar al proceso, pero hemos decidido aceptar a otros candidatos”. También existen otras explicaciones más específicas que van desde que no profundizaste en los temas que interesaban al cliente hasta tu nivel de inglés no fue suficiente para el requerimiento y rol. Sin embargo, esto puede ser contraproducente para el empleador cuando el solicitante elige debatir su razonamiento, explica la organización.
Es por esto que Michael Page ha considerado nueve motivos de porqué una empresa de headhunter pudo no haber considerado a un candidato para un proceso de selección, con el ánimo para que la próxima entrevista reduzca las posibilidades de rechazo.
1. Falta de calificación
El 80% de los candidatos son rechazados porque no cumplen el perfil técnico. Este lo componen las habilidades del día a día especializadas que requiere la posición. Esta es la razón más común por la cual los reclutadores rechazan a un postulante.
2. Sobrecalificación para el puesto
Es muy común entrevistar a un candidato con mucha experiencia en ciertas áreas y la realidad de la empresa que requiere el perfil es muy distinta, por ejemplo en el caso de manejo de personal, suele pasar que el entrevistado ha tenido a su cargo a un grupo grande de personas, pero a la empresa que postula tiene un número muy inferior de trabajadores. Esto pasa porque el candidato no se informa acerca de la empresa a la que está postulando.
3. Lo que publicas en redes
Esta suele ser una de las causales principales del rechazo. Según una encuesta realizada por Microsoft a profesionales de recursos humanos, el 70% de los reclutadores encuestados en Estados Unidos rechazaron a algún prospecto por lo que encontraron en línea.
4. Hablar mal del empleador anterior
Es muy mal visto hacer comentarios negativos sobre la última experiencia laboral. Es mejor decir que se está en la búsqueda de mejores oportunidades.
5. Sin atención al puesto del entrevistador
En la mayoría de los procesos, existen varias entrevistas por las que el candidato tiene que pasar. El candidato debe saber quién es su interlocutor en cada una de ellas, si es el gerente general, el reclutador u otra persona de este modo preguntar lo que corresponda a las funciones de cada uno.
6. No se supo expresar
Es importante en estas instancias verbalizar con cuidado. Es común, ya sea por nervios o falta de elocuencia, que un candidato pierde puntos cuando es entrevistado. Acá la recomendación es ser natural y evitar los momentos de rigidez, que podrían interpretarse como una falta de franqueza por parte del entrevistador.
7. Llegar tarde a la entrevista
La puntualidad es un factor determinante al momento de enfrentar una entrevista y es la carta de presentación para el futuro empleo, es signo de responsabilidad.
8. No transmitir el valor personal al empleador
Es fundamental que se resalten y se dejen ver las habilidades y competencias que permitirán al candidato destacar en el cargo y que además ayudarán al crecimiento de la compañía.
9. Falta de habilidades sociales
Cada vez son más importantes las habilidades que no se refieren a lo técnico, a las cuales se les llama emocionales, sociales, o a veces «blandas». Éstas son la comunicación, asertividad, empatía trabajo en equipo, responsabilidad u otras.
Fuente: AméricaEconomía