En 2015 murieron ocho personas en todo el mundo a causa del ataque de un tiburón; al menos doce fallecieron por hacerse un selfie con el que impresionar a sus seguidores.
Cada día, los seres humanos se hacen alrededor de un millón de autorretratos. Según la web de estadísticas Priceonomics, en Instagram hay unos 50 millones de fotos con la etiqueta «selfie», y el término se menciona cada semana en 365.000 posts de Facebook y 150.000 tuits.
En busca de la imagen más arriesgada e impactante, hay gente que posa colgada de acantilados, tumbada en las vías del tren, suspendida de un edificio … Y a veces la cosa acaba mal.
¿Cuántos se matan haciéndose un selfie, dónde y de qué forma, y qué perfil tienen quienes palman de esta estúpida manera?
Priceonomics ha llevado a cabo un estudio que aporta información sobre estas interrogantes, aunque se supone que hay casos que escapan a las estadísticas. Desde 2014, 49 personas han muerto intentando hacerse un autorretrato; la edad media de las víctimas es de 21 años, y el 73,5 % son hombres.
La moda de autorretratarse y subir el resultado a internet ha llegado a todos los rincones del planeta, pero ¿dónde resulta más peligrosa?
Desde 2014, el 40 % de las muertes por selfies han ocurrido en la India. Es un dato que no puede atribuirse solo a la elevada población de ese país, porque China ha informado de un único caso en el mismo periodo. La India tiene uno de los mayores índices de fallecimientos por accidentes del mundo, y ese hecho unido a la manía de los selfies explica el fenómeno.
Los siguientes estados en el ranking son Rusia (7 muertos), EE. UU. (5), las Filipinas (4) y España (4).
Fuente: Muy Interesante