¿Sabías que la lengua junto con las yemas de los dedos poseen la mayor densidad de terminaciones en el cuerpo humano? Si no lo sabías, es así, y es la principal razón por la que un apasionado beso puede enviar gran cantidad de sensaciones e información al cerebro.
El científico además indicó que durante los besos, cuatro neurotransmisores (sustancias químicas que comunican unas neuronas con otras) básicos se despiertan: la dopamina, que nos hace sentir placer y bienestar; serotonina, con la que sentimos excitación o rechazo; la epinefrina, que aumenta la frecuencia cardiaca, sentimos calor y el corazón se acelera; y la oxitocina, que genera apego y confianza.