Futurama – Don’t date robots from John Pope on Vimeo.
Los robots se han vuelto cada vez más complejos y capaces de desempeñar labores que antes eran exclusivas para los humanos y en algunos casos pueden realizarlas de más rápida y eficientemente.
A medida que estas máquinas toman una forma mucho más humana e imitan la forma que actúan las personas, cabe preguntarse: ¿Estará lejos el día en el que puedan sustituir un ser humano en la cama?
En la actualidad hay personas como Adrian Daid Cheok, profesor de computación en la London City University quien desarrolla un sistema llamado Kissinger, el cual permite dar besos a distancia transmitiendo la sensación física y utilizando unos labios artificiales que transmiten un beso entre dos personas que se encuentran en lugares distintos. Este dispositivo estará disponible muy pronto, así que el futuro con robots dedicados a darnos placer no puede estar muy lejano.
Cheok también trabaja en un proyecto llamado I-Friend, que utlizará un cuerpo caliente, labios que se mueven y órganos sexuales inteligentes.
“Creo que los robots sexuales supondrán un gran boom en la sociedad. Hay millones de personas ahí afuera que, por una u otra razón, no pueden establecer este tipo de relaciones. Pero, habrá que esperar a mediados del presente siglo para referirnos a un androide al que la gente pueda ver como un compañero, amante o posible esposo,” declaró Cheok.