El presentador de “De Boca en Boca” Miguel Cedeño compartió sus artes culinarias con Mariela Viteri, y conversó sobre varios temas de su vida personal y profesional en la más reciente entrega de “Cocinemos con Mariela”. En el clip compartido en la cuenta de Instagram de la comunicadora ecuatoriana comienzan hablando de los inicio de su carrera en la televisión. “Yo entré por prácticas del colegio. Tenía 17 años… Cuando a mí me mandan a noticias yo decía ‘esto no es lo mío, yo qué hacía ahí en noticias’… yo dije en ese momento ‘tengo que buscar mi camino’ y me fui a Miss Ecuador”.
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Mariela recordó que Cedeño tenía un cangurito en el que llevaba varios accesorios femeninos. “Yo tenía de todo para esas mujeres. Hasta calzones para mujeres, era como la Barney bolsa…”. Además Cedeño aseveró que su camino no ha sido fácil: “yo tuve que lidiar con comentarios discriminatorios… Que no les gustaba mi voz, que mi imagen no era para la televisión…”
Luego, finalmente Miguel reveló como se convirtió en “La Cerecita” con las mejores exclusivas del entretenimiento. “Sabes que como reportero tienes que buscártela como lo que sea para buscar una entrevista. Y tienes que conseguirla de donde no la hay… hay días en los que te levantas y preguntas qué hago… un día yo tenía la entrevista de un cantante que digamos no era tan pepa, o como se conoce en la farándula era un cantante hueso” comienza a explicar el animador.
Miguel continuó “y yo veía que mis compañeros tenían notas pepas…, yo dije ‘no yo no tengo una nota pepa, tengo la cerecita del pastel’… mi productora se acercó y me dijo quiero que sigas diciendo ‘la cerecita del pastel’, y desde ahí me quedé la cerecita”.
Miguel Cedeño es un profesional entregado a su carrera
Desde los 19 años Miguel ha encaminado su carrera a los concursos de belleza, como se dijo anteriormente en la asistencia de prensa en Miss Ecuador, donde creció aproximadamente tres años. De niño “yo jugaba y me miraba frente al espejo, tomaba las cremas de mi mamá y comenzaba ‘aquí estoy’” comenta el animador como anécdota de su infancia, cuando desde pequeño soñaba con formar parte de la televisión ecuatoriana.
“La gente que me conoce sabe cuánto me he esforzado para tener cada cosa que tengo… tengo 34 años”, admitió. Viteri indagó sobre el abandono del padre Cedeño al decir “cuando tenías 12, 13 años, pasó que un día tu papá se fue de la casa, y tú lo tomaste con mucha madurez”. Miguel sin titubear respondió “fue el día más feliz de mi vida. Porque por fin vi a mi mamá tan feliz. Ese día se acabó el sufrimiento para una mujer que lo único que hacía era hacernos feliz a todos sus hijos”.