Especialistas del Museo Regional de Krasnoyarsk, en Rusia, intentan averiguar la identidad de una misteriosa niña, que aparece en más de una de veintena de fotografías de época, obtenidas entre 1906 y 1908.
Aunque muchas de las fotografías, que retratan los edificios y calles de la ciudad siberiana, fueron utilizadas como tarjetas postales durante más de un siglo, la niña, que nunca sonríe, había pasado desapercibida, hasta que los especialistas del museo realizaron un trabajo de reedición en alta definición.
Bien vestida y con una trenza larga, la imagen de esta niña, de entre ocho y diez años de edad, aparece una y otra vez en más de 20 fotografías y cuatro negativos de vidrio, conservados por el Museo Regional de Krasnoyarsk, en Rusia.
En algunas fotografías, la niña es más visible que en otras, aunque en ningún caso es el motivo principal del encuadre.
“La joven aparece con distintas botas y medias, y podemos ver cambios en su vestido, pero mantiene la postura y tiene la misma expresión facial: nunca sonríe”, señala Iliá Kuklinski, investigador del museo.
Si bien se especula con que podría ser la hija, o quizá una sobrina, del fotógrafo, cuya identidad también se desconoce, lo cierto es que, hasta el momento, se trata de un completo misterio.