No solo Leo Messi triunfó el lunes en la gala del Balón de Oro 2016 al lograr su quinto trofeo, también lo hizo su pareja Antonella Roccuzzo, que se sentó en primera fila junto a los tres aspirantes al título. De ahí, de hecho, surgió la foto en la que saluda a Cristiano Ronaldo que se ha convertido en viral.
Antonella cuidó hasta el mínimo detalle para presentarse en la gran cita anual del mundo del fútbol y confió su look a Rosa Clará como ya hizo el año anterior. En esta ocasión lució un traje plateado muy ajustado y favorecedor.
La pareja de Messi ha sufrido una gran transformación desde que llegó a España. La chica tímida se ha convertido en una sensual mujer. Se ha aclarado el pelo y ha abandonado la ropa deportiva para vestirse con modelos de las mejores marcas internacionales.
Antonella Roccuzzo es la novia de toda la vida de Messi a la que conoció cuando tenía menos de 10 años, según cuentan diversas biografías del futbolista. Nunca ha concedido entrevistas. Solo se comunica con el gran público mediante su cuenta de Instagram. Messi, también de pocas palabras dentro y fuera del campo, siempre se ha aferrado a su familia.
Antonella es la segunda de tres hermanas hijas del dueño de una cadena de supermercados de Rosario, la ciudad natal de Messi. Estudió en un colegio metodista y después ingresó en la universidad pública. Mientras comenzaba a coquetear otra vez con Messi, probó varias carreras. Empezó cursando Odontología, después Comunicación Social y finalmente optó por Nutrición.
La Negra, como le llaman sus seres queridos, practicó gimnasia deportiva desde los 7 hasta los 13 años. Ya de niños jugaban a ser novios. Ella es solo un año menor que él. “Algún día vas a ser mi novia”, le escribió él en una carta. Pero no se hicieron novios oficiales hasta 2007 y no posaron ante los fotógrafos hasta 12 meses después. Pero hasta 2009 Messi no reconoció: “Tengo novia y es argentina”. Ni siquiera entonces desveló su nombre.
La pareja tiene dos hijos Thiago, de 3 años, y Mateo, de cinco meses. El mayor acompañó a Zúrich a su padre el pasado lunes.
