Se llama Diego Vallejos y es originario de Rosario, Argentina, donde conoció a Messi y Antonella, una amistad desde niños, pero que pese a los años y a la distancia, el delantero del Barcelona no olvidó invitar en su lista de 250 invitados a su próxima boda, el 30 de junio.
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«Uno tiene una vida muy diferente a la de él. Yo tengo mi trabajo y a veces las cosas son difíciles siendo un laburante (trabajador), pero mi sueño es ir a verlo jugar en Europa antes de que se retire para escuchar a todo el estadio coreando su nombre»
Diego confesó que fue testigo del amor entre el futbolista y Roccuzzo, el cual comenzó “desde chiquitos, fueron amigos, después novios y ahora será su esposa”, asegurando que es un amor para toda la vida.
Otra cosas que sorprendió al amigo de Messi fue la humildad del deportista, pues el dinero no le ha cambiado la personalidad.
«Siento ansiedad por compartir ese momento con él, que tiene la humildad de invitarme siendo uno de sus amigos de siempre y viniendo de una familia común”, agregó.
Messi no pidió regalos de bodas, en su lugar que hicieran donaciones a su fundación, pero Vallejos ya piensan en un pequeño detalle:
«Lo mío va a ser algo más simbólico, pero seguro un presente va a haber, a lo mejor le regalo una de esas parejitas de gemelos que se usan en la manga de los sacos», finalizó.
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