Hubo un tiempo en Ecuador que ser presidente no era rentable y que su segundo en el cargo tenía más posibilidades de sobrevivir en el poder que el primer mandatario; ahora la maldición parece haberse ensañado con el número dos.
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En las últimas horas del martes, la vicepresidenta de Ecuador, María Alejandra Vicuña, renunció a su cargo en medio de una investigación por presuntos cobros irregulares a excolaboradores.
Es el segundo vicepresidente que pierde Lenín Moreno desde que asumió en mayo de 2017, ambos por escándalos de corrupción.
En octubre de ese año, la Corte Nacional de Justicia emitió una orden de prisión preventiva en contra de Jorge Glas, su primer compañero de fórmula, quien luego fue condenado a seis años de cárcel por el delito de asociación ilícita en la trama por los sobornos de la empresa brasileña Odebrecht.
Tanto Moreno como Glas habían sido vicepresidentes de Rafael Correa, quien gobernó el país por una década y hoy se encuentra en Bélgica, mientras la Justicia ecuatoriana lo ha llamado a juicio por el secuestro de un exasambleísta en Bogotá en el año 2012.