Fueron una serie de revelaciones sin precedentes por parte de países occidentales con un claro mensaje para Rusia: "Dejen de hacerlo".
Los servicios de seguridad británicos y holandeses dieron a conocer este jueves una gran cantidad de información de inteligencia que implica al GRU, la mayor agencia de inteligencia militar de Rusia, en una serie de ciberataques a escala global.
Entre sus objetivos, además de instituciones políticas y deportivas y empresas, se encuentra la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas.
Las acusaciones forman parte de la respuesta internacional contra los supuestos ataques cibernéticos rusos y para exponer las operaciones del GRU en todo el mundo.
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"Al revelar esta acción rusa enviamos un mensaje claro: Rusia debe parar esto", dijo la ministra de defensa holandesa, Ank Bijleveld-Schouten.
Por su parte, Rusia calificó las acusaciones de "cóctel diabólico".
Los objetivos
- La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ): según los servicios de seguridad holandeses, operativos del GRU intentaron el pasado mes de abril, sin éxito, infiltrarse en la red del organismo internacional con sede en La Haya. La OPAQ ha estado investigando el ataque químico contra el exespía ruso Sergei Skripal, en Reino Unido.