A partir de este lunes Estados Unidos empezará a aplicar aranceles de importación del 10% a unos 6.000 nuevos productos chinos con un valor estimado de US$200.000 millones.
La lista incluye desde textiles hasta bolsos de mano y significa que aproximadamente la mitad de todo lo que China le vende a Estados Unidos pasará a estar sujeto a impuestos.
Pero los chinos no se han quedado de brazos cruzados.
Su contraataque inicial consiste en tasas que irán del 5% al 10% sobre productos estadounidenses que ascienden a un valor total de US$60.000 millones.
Y pude ver lo decididos que están a no salir derrotados en esta guerra comercial cuando visité una fábrica de tuberías en las afueras de Pekín.
Listos para la batalla
Hebei Huayang Steel Pipe (HHSP) es uno de los fabricantes de tuberías más grandes de la provincia de Hebei.
Y mientras entraba en aquella planta en expansión, lo primero que me llamó la atención fue una abrumadora pestilencia a acero quemado.