Fue calificado como "una catástrofe" para la historia y la cultura de Brasil y del continente.
Un enorme incendio devoró el Museo Nacional de Brasil en Río de Janeiro, que albergaba en su interior más de 20 millones de artículos de diferentes períodos de la historia de Brasil y del mundo.
El fuego, de grandes proporciones y cuyas causas se desconocen, cubrió la mayor parte del edificio de más de 200 años de antigüedad.