Los sofisticados sistemas para lanzar alertas tempranas de terremotos tienen una inesperada alternativa muy asequible: los cables de internet.
Investigadores en Islandia han utilizado con éxito un cable de comunicaciones de fibra óptica existente para evaluar la actividad sísmica.
Y han demostrado ser sensibles a los temblores de tierra, aunque aún no está lista para un uso generalizado.
Este método se suma a una serie de avances recientes en detección de terremotos, que incluyen aplicaciones para teléfonos inteligentes y hardware de detección más asequible.