Las ganancias de las aerolíneas se han elevado con fuerza en los últimos años y 2018 se anuncia como un año de récords gracias a un alza del 11% con respecto al año pasado.
Esto llevará los beneficios de las compañías aéreas hasta unos US$ 38.400 millones, según una proyección de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).
Y los motivos que explican ese crecimiento son muchos, del número cada vez mayor de gente que se sube a un avión al aumento de las tarifas, pasando por la existencia de una mayor oferta de vuelos.
En lo que al último punto se refiere, existen rutas aéreas que generan mucho más dinero que otras.
¿Cuáles son los tramos estrella y qué aerolíneas se benefician con ellos?
La ruta de los US$ 1.000 millones
Hay una ruta que ya sobrepasó el umbral de los US$ 1.000 millones de ingresos para una aerolínea, según un informe de la compañía de análisis de viajes aéreos OAG con base en Reino Unido.
Y ese es el caso del itinerario LHR-JFK, es decir la ruta desde el aeropuerto de Heathrow de Londres, Reino Unido al John Fitzgerald Kennedy de Nueva York, Estados Unidos, operado por British Airways (BA).