Su nombre ya era conocido. El notorio gánster Redoine Faid ya había intentado escaparse de una prisión en 2013.
Pero esta vez la fuga fue más dramática.
Varios hombres fuertemente armados crearon una distracción en la entrada de una prisión en París, donde Faid cumplía una sentencia de 25 años por un robo en el que murió una mujer policía.
Mientras los guardias desviaban su atención, un helicóptero aterrizó en el patio de la prisión y el gánster, de 46 años, huyó en éste.
El helicóptero voló hacia la cercana área de Gonesse y posteriormente la policía lo encontró quemado.